Usted está aquí

Los fieles veneran en Bilbao las reliquias de San Antonio de Padua

Peregrinación San Antonio de Padua

DICEN que cuando predicaba en Rímini, San Antonio se encontró con un campesino no creyente que le planteó un reto: abrazaría la fe si, después de tres días sin comer, su mula se arrodillaba ante la hostia que sostenía el santo rechazando el pienso con el que le tentaría su dueño. Y así fue. Es uno de los milagros que se atribuyen al protector de los pobres, de quienes buscan pareja, ganaderos, o viajeros, cuyas reliquias aterrizaron ayer en Bilbao procedentes de la basílica de Padua en la que está enterrado, uno de los mayores centros de peregrinación de Italia. Se trata de la primera vez que uno de sus relicarios pisa suelo vasco y lo hizo rodeado de gran expectación. 

“Estamos ampliando el programa, no damos abasto. Nos están llamando desde más sitios para ver si podemos acercarnos”, explicó Begoña González, jefa de la organización de la revista El pan de los pobres.Fundada hace 120 años en Bilbao, la publicación promueve “la evangelización católica y noticias sobre San Antonio” en su versión en papel y su página web. “Con los tiempos que corren podemos decir que continuar en activo representa otro milagro”, añadió. 

En uno de sus viajes a Lisboa y Padua surgió la posibilidad de que los fieles pudieran orar en la capital vizcaina ante una costilla de San Antonio y el busto que contiene un trozo de masa corpórea hallada al exhumar su restos en 1981, coincidiendo con el 750 aniversario de su fallecimiento. No se había cumplido ni un año de su muerte, en 1231 a los 35 años, cuando Antonio de Padua, sacerdote franciscano nacido en Lisboa, fue canonizado por el Papa Gregorio IX. Poco después se le erigió una basílica en la ciudad de Padua donde se depositó el sarcófago con sus restos. El que permanecerá hasta mañana en Bilbao para partir luego a Madrid es el único busto que custodia sus reliquias. Se cataloga las que se exhiben en Bizkaia de grado uno, ya que forman parte de su cuerpo. En un escalafón inferior se encuadran objetos que han entrado en contacto físico con el santo y aquellos que hayan tocado una reliquia de primer grado. 

Clasificaciones al margen, a las personas que acudieron ayer a la iglesia de San Nicolás, en el Arenal, les movió la devoción hacia uno de los santos más populares. El delicado busto con un cristal abierto a través del cual se contempla la reliquia “solo se muestra, mientras que la costilla sí se dejó tocar a los fieles”, diferenció Begoña González. El obispo de Bilbao, Mario Iceta, ofició ayer una misa que sirvió de recibimiento oficial a la delegación italiana antes de que las reliquias se desplazaran al monasterio de las Mercedarias de San José, en Loiu. 

La iglesia de San Nicolás volverá a abrir sus puertas hoy entre las 10.30 y las 13.30 horas y a las 11.30 horas tendrá lugar una eucaristía. Entre las 16.30 y las 19.00 horas las reliquias estarán en la residencia del Sagrado Corazón del Monte Abril. Mañana, último día de San Antonio de Padua en Bilbao, será igualmente intenso. Entre las 8.30 y las 11.00 horas se podrá orar ante el busto y la costilla en las Capuchinas de Basurto, de 11.30 a 13.30 en la residencia Mi casa de las Hermanitas de los Pobres, a las 17.00 horas en las Clarisas de Artebakarra, en Derio, y entre las 19.00 y las 20.30 en la parroquia de San Antonio de Padua, en el barrio de Irala.