La reliquia del fundador de los Salesianos estará en las casas salesianas de Cambados el 21 de Mayo, Santiago, 22 y 23, y La Coruña, 25 y 26.
Para Mons. Julián Barrio, "es un acontecimiento singular y de trascendencia para la vida diocesana que tiene el gozo de contar con la presencia de miembros de la Familia Salesiana en la Diócesis, ejerciendo diversas tareas pastorales siguiendo el carisma y el espíritu de su Fundador, a los que en esta ocasión tan especial quiero en nombre de todos los diocesanos manifestarles nuestro cordial afecto y reconocido agradecimiento, uniéndonos a ellos para glorificar y venerar también a nuestra Madre, bajo la advocación de María Auxiliadora, en este mes de mayo".
En la pastoral, el prelado habla sobre la figura de Don Bosco, su obra y espiritualidad, el sentido de la santidad y lo presenta como ejemplo en la educación y evangelización de los jóvenes. "El desafío, escribe, es que el espíritu de Don Bosco se mantenga entre nosotros, siendo el guía que ilumine y haga creativo y audaz el trabajo por los jóvenes, y el maestro que nos enseñe a tener la paciencia suficiente para amar y comprenderlos siempre".
Para alcanzar estos fines, a juicio de Mons. Barrio, es imprescindible "la familiaridad con Dios, porque educar es cosa del corazón y sólo Dios es su dueño, y desde la devoción a María auxiliadora. Sepamos admirarle pero sobre todo imitarle".
El Arzobispo de Santiago de Compostela concluye su carta señalando que "la venida de la Urna de la reliquia de Don Bosco nos animará a todos a vivir la llamada a la santidad con su estilo: alegre, sencillo y comprometido en la fidelidad al Señor, en el amor a la Iglesia y en la entrega servicial a los demás y a hacer creativo y audaz nuestro trabajo por los jóvenes, teniendo la paciencia suficiente para amarlos y comprenderlos siempre".