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Imágenes para la esperanza: Valientes para decir la verdad

El letrero, en inglés y ruso, dice: «No a la guerra. Detengan la guerra. No crean en la propaganda. Aquí les están mintiendo. Rusos contra la guerra».

En el contexto de una férrea represión a la libertad de expresión en Rusia, penándose hasta con 15 años de cárcel cualquier información que contradiga la doctrina oficial del Kremlin, este valiente acto cobra aún más significado. La periodista, pocos instantes de realizar esta protesta tan significativa, colgó un video explicando su decisión, en el que dijo:

«Lo que está ocurriendo ahora en Ucrania es un crimen. Y Rusia es el país agresor, y la responsabilidad de esa agresión recae en la conciencia de un solo hombre.Este hombre es Vladimir Putin. Mi padre es ucraniano, mi madre es rusa. Y nunca han sido enemigos. Y este collar alrededor de mi cuello es un símbolo de que Rusia debe detener esta guerra fratricida inmediatamente. Y nuestros pueblos hermanos aún pueden reconciliarse. Por desgracia, durante los últimos años he estado trabajando para Channel One haciendo la propaganda del Kremlin. Y ahora estoy muy avergonzado de ello. Me avergüenzo de permitir que se digan mentiras desde la pantalla del televisor.

Debería darnos vergüenza permitir la zombificación del pueblo ruso. Nos mantuvimos en silencio en 2014 cuando todo empezó. No salimos a los mítines cuando el Kremlin envenenó a Navalny. Sólo observamos en silencio este régimen antihumano. Y ahora el mundo entero y 10 generaciones más de nuestros descendientes nos han dado la espalda. No hay manera de lavar la vergüenza de esta guerra fratricida. Nosotros, el pueblo ruso, somos pensantes e inteligentes.

Sólo está en nuestra mano detener toda esta locura. Ven a los mítines, no tengas miedo de nada. No pueden encerrarnos a todos».

Defender la verdad puede costar mucho, incluso la vida. Los cristianos tenemos innumerables ejemplos de esto, y no solo de tiempos de los primeros cristianos, sino también hoy día. Ya dijo el papa Benedicto XVI que «los cristianos son actualmente el grupo religioso que sufre el mayor número de persecuciones a causa de su fe en el mundo» (Mensaje para la Jornada Mundial de la Paz del 1 de enero de 2011). Aún así, la verdad es para todo cristiano un deber ineliduble, cueste lo que cueste. Y para un vicenciano, la defensa de la verdad, sobre todo la defensa de los que son oprimidos por los «poderes del mundo», está impreso en nuestra identidad.

Que el ejemplo de esta periodista nos anime a todos a trabajar por la justicia y defender la verdad.