Para animarnos el Salvador a mirar con solicitud todo aquello que atañe a nuestra salvación, propuso la parábola de las diez vírgenes, de la manera siguiente:

Las parábolas son ejemplos, o símiles, tomados de lo que generalmente acontece entre los hombres. 

La casa de Lázaro, especialmente después de la conversión de la Magdalena, era el albergue de los predicadores del Evangelio

En Betsaida le presentaron a un ciego al que también tocó los ojos con su saliva, e imponiéndole las manos le devolvió el uso de la vista.

Resucita al hjo de una viuda.

Cierto día, entrando Jesús en la ciudad de Naim, encontró una gran multitud que acompañaba a la sepultura a un difunto

Los hechos referentes a nuestro divino salvador que hasta ahora hemos relatado nos lo dan a conocer, especialmente, como hombre. 

María Magdalena pertenecía a una rica familia de Betania. Tenía un hermano llamado Lázaro, y una hermana llamada Marta, ambos mucha virtud.