Dedicó varios sermones a ensalzar y cantar las glorias de María. De estos escritos sacamos las alabanzas y títulos que San Antonio de Padua le daba a la Virgen:
- María es princesa, reina, señora y esperanza nuestra.
- María es la estrella de la mañana, por la pureza de su Natividad, que iluminó al mundo, cubierto de tinieblas y sombras de muerte (Sermón 1051)
- María es la estrella del mar, porque estamos en medio del mar, somos azotados por las olas, sumergidos por la tempestad, pero Ella libra de la tempestad a quienes le invocan, les muestra el camino y les guía al puerto de la salvación. (Sermón 2109)
- María es la luna llena, por ser en todo perfecta. La luna no está completa en el cuarto creciente ni en el menguante porque tienen manchas y puntas.
¿Cómo oraba San Antonio a la Virgen?
Los devotos de este Santo, podríamos rezar también con las mismas palabras que Él usaba;
"Señora nuestra, única esperanza. Te suplicamos que ilumines con el esplendor de tu gracia nuestras almas, que las purifiques con el candor de tu pureza, que las enciendas con el calor de tu visita y nos reconcilies con tu Hijo para que merezcamos llegar al esplendor de su gloria. Amén. (Sermón 1065)