15 DE JULIO - Ignacio nació en Portugal, hijo de una familia ilustre. Estudió la enseñanza media en los padres jesuitas y, posteriormente, llamado por Dios, decidió entrar en la Compañía de Jesús, donde se distinguió como un sacerdote encendido de amor por las almas y por su caridad haciendo el bien.
En 1556, Francisco de Borja, General de la Compañía, le nombró visitador en Brasil, en esta inmensa nación se topó con las enormes dificultades que le opusieron los Calvinistas y Luteranos, estas dos confesiones protestantes habían invadido el país de misioneros.
Tras hacer su visita a Brasil, sacó esta conclusión: "Hay que fundar un noviciado y un seminario para estudiantes con vocación jesuita". Volvió a Portugal para pedir dinero y los jóvenes le siguieron, por lo que se le ocurrió hacer lo mismo en Roma.
El Papa le animó en su proyecto para misionar aquel vasto país y se le unieron 69 misioneros salidos de Lisboa en junio de 1570.
Durante la travesía se enfrentaron a los barcos de los protestantes, cayeron derrotados y fueron martirizados.