para lo que dedicó la mayor parte de su tiempo a preparar y a dirigir retiros espirituales y estas experiencias, unidas a su anterior labor como misionero, lo familiarizaron con las necesidades espirituales, los problemas personales, familiares, los anhelos y proyectos de los fieles, en cuya ayuda se volcó.
Algunas de sus preguntas: qué es orar, cómo hacerlo, cómo lograr que sea realmente eficaz y que tenga fruto, a pesar de los numerosos obstáculos que podemos encontrar en nuestra vida diaria. Porque nada hay más útil que la oración -recuerda san Vicente de Paúl-; por eso hemos de estimarla, amarla mucho y poner esmero en hacerla bien. Una de sus encantadoras frases: “Yo deseaba llegar a los corazones de la gente”.
Lawrence G. Lovasik (Pennsylvania, 1913-1986), hijo de padres eslovacos y el mayor de ocho hermanos, fue ordenado sacerdote en 1938. Completó sus estudios en Roma. Desarrolló una labor misionera en Estados Unidos, fundó en 1955 la congregación de las Hermanas del Divino Espíritu. Dedicó su vida a predicar retiros espirituales.