La forma de predicar nuestro San Antonio era tan espectacular, que sus seguidores lo esperaban desde la noche anterior, al día en que celebraba su Misa.
… Encontrándose predicando en una lengua, lo entendían oyentes de diferentes naciones y se le escuchaba a unas dos millas de donde Él se encontraba.
… En una ocasión un hereje llamado Bonibillo le negó la presencia de “Cristo en la Eucaristía”, Antonio hizo que la mula de ese hereje, que hacía tres días que estaba sin comer, se arrodillara delante de la Eucaristía. Lo que hizo que su dueño “Bonibillo” se convirtiese.