Tristeza del joven rico
Habla el Papa — 02/11/2021
No sabemos el nombre del “joven rico”. En realidad, el Evangelio habla de él como “uno”, sin mencionar su edad ni nombre, para sugerir que todos podemos vernos en ese hombre. (Mt 19,20-22).
Leer másServir a los necesitados
Habla el Papa — 04/10/2021
De camino a Jerusalén, los discípulos de Jesús discutían sobre quién «era el más grande entre ellos». Entonces Jesús les habló de forma contundente, que también se aplica a nosotros hoy: «Si uno quiere ser el primero, sea el último de todos y el servidor de todos» (Mc 9,30-37).
Leer másEl eje de nuestro día
Habla el Papa — 01/09/2021
Jesús sigue predicando a la gente que ha visto el prodigio de la multiplicación de los panes y después de haber recordado el maná, aplica el símbolo del pan a sí mismo: «Yo soy el pan de la vida» (Jn 6,48)
Qué significa pan de la vida? Para vivir se necesita el pan. Quien tiene hambre no pide comidas refinadas y caras, pide pan. Quien no tiene trabajo no pide sueldos altos, sino el “pan” de un empleo. Jesús se revela como el pan, es decir lo esencial, lo necesario para la vida de cada día.
Leer másLa tempestad calmada
Habla el Papa — 12/07/2021
La barca en la que los discípulos atraviesan el lago es asaltada por el viento y las olas y ellos temen hundirse. Jesús está con ellos en la barca, sin embargo, se queda en la popa durmiendo sobre un cabezal. (Mc 4,35-41)
Leer másLas despedidas suelenser siempre tristes
08/06/2021
La conclusión del Evangelio de San Marcos (Mc 16,15-20) nos presenta el último encuentro Jesús con los discípulos antes de subir a la derecha del Padre
Leer másDescubrir la paz del Corazón
Habla el Papa — 03/05/2021
El lunes después de Pascua se llama también Lunes del ángel, porque recordamos el encuentro del ángel con las mujeres que fueron al sepulcro de Jesús (cfr. Mt 28,1-15).
Leer másHijo del hombre, Hijo de Dios y luz
Habla el Papa — 06/04/2021
Este cuarto domingo de Cuaresma la liturgia eucarística comienza con esta invitación: «Alégrate, Jerusalén... ». (cf. Is 66,10). ¿Cuál es el motivo de esta alegría? En plena Cuaresma, ¿cuál es el motivo de esta alegría? Nos lo dice el evangelio de hoy: «Tanto amó Dios al mundo que dio a su Hijo único, para que todo el que crea en él no perezca, sino que tenga vida eterna» (Jn 3,16). Este mensaje gozoso es el núcleo de la fe cristiana: el amor de Dios llega a la cumbre en el don del Hijo a una humanidad débil y pecadora. Nos ha entregado a su Hijo, a nosotros, a todos nosotros.
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