Lo más preocupante de todo es que el sistema educativo en España desde hace décadas, salvo algún periodo excepcional, está basado en principios donde no prima la excelencia
sino la mediocridad.
La disciplina, el esfuerzo, la cultura general, el respeto por los demás, etc. son valores relegados a un segundo plano en los planes de educación.
Hay, sin duda, diferencia entre unas Comunidades Autónomas y otras, pero el Plan General de Educación y las directrices que marca el ministerio de Educación se podría decir que apuesta por la mediocridad, abandonando la excelencia.
Cada vez se dan más facilidades a los alumnos para pasar de curso.
El progreso de nuestro país está en la formación que demos a nuestros jóvenes.
“La educación en el punto de mira” Laura
Cuesta. La Vanguardia, 5/10/2022.