Por ello la Redacción de EL PAN DE LOS POBRES considerado oportuno acercar a sus lectores, de forma sencilla y amena, la vida de San Antonio, al que en España siempre se la considerado de Padua (lugar donde está enterrado), pero que en los países de influencia portuguesa se le ha denominado de Lisboa (lugar donde nació).
Primeros años
Nació Lisboa, según la tradición, el día 15 de Agosto de 1195, siendo el primogénito del matrimonio formado por Martim Bulloes y María de Tavera; le pusieron por nombre Fernando Martim de Bulloes y Tavera de Azevedo. La casa donde nació el santo, en el barrio de la Alfama (en la parte alta de Lisboa, camino del Castillo de San Jorge), fue destruida completamente en el terremoto que arrasó Lisboa el 1 de noviembre de 1755 y sólo se conserva un pequeño sótano. En el mismo lugar se levanta en nuestros días la Iglesia de San Antonio.
En aquellos días ocupaba la Silla de San Pedro el Papa Celestino III y reinaba en Portugal Don Sancho Primero.
El padre pertenecía a una familia de origen francés, que luchó a las órdenes del Rey de Portugal y se asentó en tierras próximas al río Tajo, donde se fundó la ciudad de Lisboa. La familia de su madre entroncaba con la familia del rey Fruela de Asturias.
La madre de San Antonio recibió sepultura en una Capilla del Convento de San Vicente de Fora, en Lisboa.
Estudios
Durante su infancia Fernando estudió en la Escuela de la Catedral, donde un tío suyo era maestrescuela. La modestia y frugalidad de sus costumbres revelaban que Fernando podía hacer cosas grandes en el futuro; asistía con atención a los Oficios divinos y, en todos sus actos, era devotísimo de la Virgen María, patrona del templo catedralicio, a la que tomó como su valedora.
De joven, cuando era aún estudiante, al verse asaltado por una violenta tentación, Fernando se refugió en la Catedral y trazó una cruz en la pared de las escaleras que suben al coro. La tentación se aleja y la piedra se ablanda bajo sus dedos, dejando la sagrada señal, que hasta hoy se venera en una torre de la Catedral de Lisboa.
Canónigo en la Orden de San Agustín
Cumplidos los quince años, en 1210, decidió entrar en el Convento de San Vicente de Fora, a las afueras de Lisboa, y profesó en la Orden de los Canónigos Regulares de San Agustín, donde se dedicó intensamente al estudio. Este convento había sido fundado por el Rey Alonso Enríquez, durante el sitio de la ciudad de Lisboa, ocupada por los moros.
En este convento se vivía una intensa vida de piedad y era reconocido por la santidad de costumbres de los que en el vivían; estos fueron los motivos que movieron a Fernando de Bulloes, ya que era una escuela de las virtudes que el deseaba practicar.
Su entrada en el convento no estuvo exenta de una cierta oposición familiar, ya que, en sus proyectos de vida para el primogénito, aspiraban a que ocupase en la sociedad el puesto prominente, que correspondía a su rango social.
Traslado a Coimbra
A los dos años y medio de haber profesado, en el año 1212, ante las constantes visitas que recibía de familiares y amigos, Fernando toma la decisión, de acuerdo con sus superiores de trasladarse al Convento de la Santa Cruz en Coimbra.
En este convento, en el año 1218, a los 23 años y ocho años después de haber profesado, fue ordenado sacerdote y empezó a celebrar la Santa Misa.
